Presidente Directorio FUDEA UFRO, Jorge Petit- Breuilh “ES UN GRAN DESAFÍO QUE ME TOMO CON SERIEDAD Y COMPROMISO”

Cuando el rector de la Universidad de la Frontera, Eduardo Hebel, le pidió liderar el directorio de FUDEA UFRO, Jorge Petit-Breuilh cuenta que se lo tomó con mucha gratitud, por el reconocimiento que involucraba de parte de la autoridad universitaria y del directorio de la Fundación, “lo tomé con agradecimiento por creer en mis competencias, por creer que puedo ser un aporte para el desarrollo futuro de esta fundación, pero también lo tomé con inquietudes, dado que tuve que estudiar en profundidad sobre el quehacer de FUDEA” asegura el Ingeniero Civil Industrial y Magíster en Desarrollo Humano.

Jorge Petit-Breuilh nació en Pucón y llegó a los 10 años a Temuco, donde valora mucho vivir, ya que según sus propias palabras “Esta es una ciudad donde puedes avanzar profesionalmente, hacer vida familiar y tener una mejor calidad de vida. En otra ciudad, probablemente no sería posible”, lo cual también influye en su vida familiar, donde asegura contar con el gran respaldo de su esposa, “con ella compartimos mucho las visiones profesionales y de esa manera nos apoyamos mutuamente en nuestros desafíos”.

La vinculación de Petit-Breuilh con la Universidad de La Frontera, comienza el año 1995 cuando ingresa como estudiante de pregrado a la carrera de Ingeniería Civil Industrial y desde esa fecha siempre ha estado vinculado de alguna manera a esta institución, ya sea como estudiante, o en diferentes roles laborales, como fue la dirección del Instituto de Desarrollo Regional y Local IDER, y actualmente como vicerrector de Administración y Finanzas de esta casa de estudios.

Con respecto a su rol como presidente del directorio de FUDEA, considera que “Tiene un tremendo grado de importancia por la responsabilidad que conlleva, por las decisiones que este directorio toma, porque esas decisiones impactan en los trabajadores y en el territorio. Este es un gran desafío, que me lo tomo con seriedad y compromiso con la Universidad y con los territorios en los que FUDEA impacta; también con gratitud hacia el directorio, por la confianza que han tenido en mí y por lo mismo he puesto mucho esfuerzo para estar a la altura de las expectativas”, asegura.

Si bien, FUDEA se inicia como una plataforma de apoyo a la gestión y administración de la Universidad de La Frontera, Petit-Breuilh afirma que es un convencido de que hoy la fundación se ha consolidado como un actor importante para el desarrollo de La Araucanía y del sur de Chile, en temas como fomento productivo, educación, tecnologías e interculturalidad. “FUDEA juega el rol de visibilizar el quehacer de la Universidad, en lo que refiere a investigación y vinculación con el medio, un rol de aportar al posicionamiento de la UFRO en el sur de Chile” comenta.

Por lo anterior, ve con buenos ojos el futuro de la Fundación en el mediano y largo plazo, “veo que FUDEA está creciendo en áreas temáticas y también en su radio de impacto. FUDEA parte en La Araucanía y hoy tiene representación desde esta región hasta Magallanes. Creo que, a mediano y largo plazo seguirá abriendo líneas de trabajo; obviamente sin perder su propósito central que es el desarrollo de la educación, el fomento productivo, la tecnología y la interculturalidad”.

Así como la Fundación ha crecido, también lo ha hecho el equipo humano de trabajo, contando con colaboradores tanto en Temuco, Valdivia, Puerto Montt, Chiloé y ahora recientemente en Punta Arenas. “Antes de la crisis sanitaria, tuve la oportunidad de conocer a los equipos de los territorios, y pude constatar el tremendo esfuerzo que hacen para dejar muy en alto el nombre de la Universidad de La Frontera y de FUDEA, siendo embajadores de nuestros valores, principios y quehacer institucional. Hoy a todos ellos les diría que sigan trabajando con esa convicción que los caracteriza y que, a pesar de que estamos lejos, los tenemos presente todos los días” finaliza Petit-Breuilh.